miércoles, 11 de mayo de 2011

El Séptimo Infierno

"El Séptimo Infierno es un bar, una enorme discoteca, es el lugar donde te encuentras a las cuatro de la mañana sin estar seguro de si estás tocando fondo o en el mejor momento de tu vida.

Tiene su lugar y sus medidas en el espacio, pero quienes entran en él no lo ven exactamente del mismo tamaño y con la misma forma, y no lo encuentran en el mismo sitio. Pero todos quieren llegar a él, y todos quieren volver a él, porque cuando estás dentro encuentras lo que estabas buscando.

El Séptimo Infierno está regentado por Alice Vannoy, que es una joven que siempre sonríe, y que puede ser la más amable o la más cruel de las mujeres, dependiendo de con quién está tratando.

En la Divina Comedia, los peores círculos del Infierno, el Octavo y Noveno, estaban reservados a los mentirosos y los traidores. Hasta allí, Dante aún mostraba compasión hacia los condenados.Según el criterio de Vannoy, si por tus pecados no mereces mayor condena que la de ir al Séptimo Infierno, todavía puedes ser perdonado.Pero, ¡ay! del que cruza sus muros."


Desde la sonrisa que recuerdo en sus viajes con Maga, tengo la esperanza de montar ese Bar del Septimo Infierno en alguna parte de la Luna.

Conjunto Bode, Pallas, Murchinson

A la izquierda superior de la imagen tenemos el conjunto de cráteres formado por Bode, Pallas y Murchinson. Otros más aislados que se pueden contemplar en la parte izquierda son los de Ukert, Triesnecker y Bosclovich. A la derecha vemos en relieve el cráter de Horrocks.

Celestron C6 s-gt, con pc bresser ocular 13mm y barlow 3x. Imágenes procesadas con AVI2Image.

Las misiones tripuladas vuelven, paso a paso, a tener una base sólida por los múltiples proyectos espaciales internacionales. Entrenamientos en Río Tinto para simular una misión a marte, en piscinas para probar los trajes y hacer simulacros de reparaciones (como por ejemplo el exitoso del Hubble), o el proyecto Orion para continuar las históricas misiones Apolo, hacen que el hombre vuelva con más tecnología y conocimientos que en antaño en la exploración del Universo.

Nuestro amor por Gaia y el aprendizaje para ser autosuficientes, nos dará la formación necesaria para cuidar de nuestro planeta y ser completamente autónomos en otros medios. Es posible combinar la tecnología con la naturaleza. Sólo estamos a un paso.

¿Por qué no podríamos ser los John Seymour del espacio? Me imagino a nuestro amigo plantando hortalizas en la Luna, buscando el equilibrio de los elementos de la vida en otros mundos.

martes, 10 de mayo de 2011

Cultivar vida

No es la película de Waterworld, pero en las ciudades andamos escasos de tierra. "El hombre pertenece a la tierra y no la tierra al hombre" decía el ilustre jefe Sioux en una carta al hombre blanco. Los cubrimientos asfaltados, edificaciones cada vez más van cubriendo la tierra que en antaño fue agradecida al hombre.

He dado un pequeño paso en mi huerto urbano de tomates (de semillas de restos de tomates comprados en la frutería o bien del huerto) y los planteles generados por superproducción (bueno 16 plantitas) por mi falta de tierra y espacio los cultivaré en un huerto de la familia. De esta manera se colabora en la producción con la germinación de unos pocos planteles (eso sí son diferentes especies).

De momento tengo dos elementos sin coste: aprovechar el agua de lluvia almacenada en recipientes cerrados, y semillas de productos que se han echado a perder o restos de frutas y hortalizas. Y de vez en cuando alguna macetita de tierra del huerto familiar.

El siguiente paso John Seymour que quiero dar es hacer unos planteles de meloneras, para hacer un starter para este huerto familiar y un par para el mío.

Es impresionante lo agradecida que es la vida que, ni se vende ni se compra.

lunes, 9 de mayo de 2011

Cormorán moñudo


Una vuelta por l'Escala te permite disfrutar de las aves marinas a poca distancia. El paseo marítimo siempre guarda pequeñas sorpresas como este "polluelo" de cormorán alimentado por sus activos padres pescadores.

jueves, 5 de mayo de 2011

Metas

Profundizar en el tiempo para conseguir una meta supone ganar instantes de felicidad diariamente. Leyendo hoy un artículo de reflexión muy interesante del portal de e-ciencia sobre "hacer lo que te gusta" me ha ayudado a seguir debatiéndome interiormente. Hace unos años que decidí "dejarme llevar" en muchas decisiones que he tomado, pero claro está reflexionándolas previamente. En pocos minutos puedes recorrer millones de años luz para llegar a tu felicidad. Sacar brillo a vuestras aficiones, inquietudes y pequeños detalles diarios que os hacen feliz, aunque sea sólo un instante.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Polinizadores

Llevan miles de años formando una sociedad con las plantas, y debemos respetar su labor de favorecer la diversidad genética en la reproducción sexual. Son vectores de la vida, un engranaje más del conjunto de Gaia.

La elegancia y el respeto

Viendo construcciones como ésta me quito el sombrero por considerar todos los detalles posibles para visitar este parque natural respetando al máximo todos los seres vivientes que lo ocupan.